CASTELLON - LA POBLA: CRESTEANDO.

A la espera de que David pase el track con el recorrido y que Salva nos haga unos comentarios sobre su experiencia con el remolque de la bici, os hago una breve descripción de lo que fue esta espectacular ruta, que lamentablemente se vio empañada por una pertinaz niebla que nos impidió disfrutar más del paisaje, pero que en todo caso nos ayudó a sobrellevar la caminata sin agobios de calores.

La ruta sale por la UJI y el Hospital de la Magdalena, para por la acequia llegar hasta Penyeta Roja y empalmar con el GR de la Marató i Mitja, que con alguna variante particular que alarga pero embellece el recorrido desde la cantera, nos llevo al extremo sur del campo de golf. Desde allí, nada mas cruzar la carretera que conduce a la ermita de Sant Vicent se coge una senda (trialera en descenso para los BTTeros), que en muy poco tiempo y tramo nos pone en altura para empezar a crestear. Desde ahí la mayoría conocéis el camino, y para el que no le suene, detrás de nosotros en la foto se puede ver lo que se recorre desde La Coma hasta la primera cima.

Esa primera cima importante es el RACA, donde aprovechamos para un breve avituallamiento líquido y alguna foto testimonial. Mas o menos, si no en distancia, sí en tiempo, estábamos a mitad de camino entre la Pobla y Castellón, con que para otra ocasión y si hay ganas y tiempo se puede hacer hasta allí una vuelta circular.

La siguiente cima, después de descender por una pista bastante vertical y resbaladiza por la humedad, se busca mediante una pista ancha la subida más importante a la Pedra Blanca. Aquí la subida es más vertical y larga que la anterior, y salvo el inicio de la senda que está algo oculta, seguirla es bastante fácil. El cansancio ya hace mella y la verdad es que ya llevamos bastante tiempo andando más que corriendo. Si no recuerdo mal, aquí ya nos ponemos a una altura de 680 metros y las vistas a pesar de la niebla son impresionantes. Al fondo a la derecha se divisa La Pobla.

A partir de aquí todo es un descenso, complicado en su inicio, pues se desciende casi "desescalando" por una especie de senda sinuosa, muy inclinada y entre roca; pero una vez alcanzada la senda normal el descenso es ágil y rápido (algo peligrosillo por la humedad, pero sin más complicaciones). Y en esa carrera hacia la meta, siempre nos queda tiempo para mirar el camino y contemplar su belleza, y para muestra un "modesto" botón con esta última foto con el fondo de la subida al "Morico".

Como siempre la satisfacción final (festejada en un suculento almuerzo con la mejor compañía de Salva -que quedó contento con la prueba del remolque-, Vicente -que siempre tiene un hueco para unos "baloncitos" de cerveza en La Pobla, y Marián -que ayudó en la logística-). Total algo más de 3 horas y media de caminata y 25 kms o más (el GPS se puso a funcionar a los 40 minutos de salir de casa) de ruta sin duda para valientes! La verdad es que acabé medio muerto, aunque "sin desperfectos graves", pero no sé si por una rápida rehidratación (con baloncitos en La Pobla y unas Alhambritas en La Parroquia), o porque definitivamente el cuerpo entrenado asimila el esfuerzo, la verdad es que hoy domingo me he levantado sin secuelas importantes y con mucha menos fatiga de la que suponía. Nos vemos en Tombatossals!!!