DOS HOMBRES Y UN DESTINO

Ese es el título peliculero de un clásico cinematográfico que con menos rebombori viene de perlas para contar otra secuencia de dos amigos decididos a tachar otra de esas rutas pendientes en su agenda de marchas de montaña. Y es que el sábado 14 vimos cumplido el deseo de hacer una ruta a pie por la Serra d'Espadà aprovechando la marcha de Les Fonts d'Eslida.

Esto supone en cierta medida nuestro retorno a los senderos, porque el gusanillo de las carreras populares no puedes evitar que se te meta en las venas. Después de comprobar que David ha subido un peldaño más en su buen estado de forma física, y que yo después de varios meses parece que supero las moléstias físicas que arrastraba desde finales del año pasado; creo que estamos en condiciones de aprovechar este dulce momento para continuar tachando rutas pendientes: quien sabe si la próxima no será la Cursa Ibérica de Figueroles. Mas allá de grandes proyectos, me ilusiona la idea de ir superando etapas.

En cuanto dispongamos de más fotos, ya colgaremos el reportaje gráfico de la ruta por la Serra d'Espadà.