EL BARRIO EN LA TRANS-IRTA

Bueno, me ha costado un poco pero al final he podido ponerme a publicar estas entradas de nuestra última movida. El título de los del barrio viene justificado porque todas "las casas" del barrio estaban representadas en esta marcha: los izquierdo-tena, los irigaray, los muñoz-bort, los barrachina-gauchia y los tello-de la osa. Más que dar detalles de la ruta en sí, que cualquiera puede encontrar en wikiloc (o que David pondrá un enlace del track), sólo diré que la misma nos llevó desde Alcoceber a Peñíscola cresteando por toda la Sierra de Irta.

La primera subida hasta la ermita de Santa Llúcia ya nos puso el cuerpo tibio, y en realidad es la única subida con dureza del trayecto, con lo que una vez superada el resto son rampas y repechos que se superan sin dificultad.

Eso sí, es muy importante no salirse de las marcas o llevar un gps, porque un extravío en mitad de la Sierra puede suponer un serio disgusto, y más un 21 de agosto a las 12 del mediodía. El primer tercio del trayecto es relativamente amable, incluso con algo de pino y sombra, pero el resto... Quizá lo mas hermoso del trayecto son los paisajes al final de sus laderas y sobretodo los de la costa.
Así que es indispensable aprovechar cualquier sombra del camino para recuperar fuerzas y protegerse unos instantes del sol. A la hora de coordinar a muchas personas, no se pueden elegir fecha y no hay tanta disponibilidad, así que a pesar de todo decidimos hacer la ruta en agosto, cuando lo aconsejable sería hacerlo en primavera u otoño.

Pero bueno, cuando uno está decidido y tiene ganas puede superar cualquier tipo de dificultades, y a pesar de estas caras, pasamos un día de senderismo espléndido. Aquí en la ermita de Sant Antoni, casi llegando a Peñíscola nos recuperamos gracias a la sombra y un pozo con agua fresquita, que nos permitió acabar con soltura y más o menos sobrados lo que nos quedaba de ruta. Justamente David que parece que haga peor cara, acabó haciendo los últimos 4 kms corriendo! jjj. Como yo digo, cuando sea mayor quiero ser David!

Y cuando uno se lo ha ganado, pues encima disfruta del premio con doble alegría. Como véis a Vicente ya se le han secado las lágrimas y ha cambiado de cara!