10 KM 42 y pico

En clave de western, ya puedo poner otra muesca en la culata del revolver. Pero más importante aun son las sensaciones y sobretodo a lo que yo le doy una mayor relevancia es la recuperación y la ausencia de secuelas tras la carrera.

Como comentario a la carrera indicar que no cabe duda que se trata de una prueba de primer nivel, con muy buena participación, buenas marcas y un mejor ambiente en las calles. Definitivamente este 10.000 se ha consolidado por méritos propios de la organización, por su prestigio, y por la participación.

En cuanto a esas sensaciones que comentaba, la ausencia de molestias y lesiones, y un mes entrenando a buen ritmo y con la ayuda de mi amigo Isidoro que me ha apretado para cumplir con rigor las sesiones, me hacía ser optimista. No lo ocultaba y a quien me preguntaba confesaba que esperaba obtener un buen resultado. Para qué negarlo cuando uno no tiene miedo a fracasar, sino a poner todo el esfuerzo en intentarlo y conseguirlo.

Como comenté en el post del 20 de septiembre, hoy se trataba de mi primer test de cara a la preparación para la maratón de Diciembre. Y no puedo decir más que el resultado ha sido satisfactorio y que la única amenaza que puedo considerar por el momento es la del sobreentrenamiento. He mejorado la marca de la edición anterior, pasando de correr 4'20'' a 4'16'' por km, consiguiendo bajar de los 43 minutos: 42'24'' paso por meta y tiempo oficial de 42'37''. No es para tirar cohetes, pero con esos 40 segundos he conseguido mejorar 102 posiciones respecto al año anterior: 244 y 24 de la categoría. En resumen, todo esto me anima para seguir "castigándome", y quien sabe si no me decidiré algún día a entrenar específicamente para bajar de los 42' (de momento no me obsesiona).