Viernes, 8.00h, comienza el mini-reto, llegar hasta el camping de Alcossebre con mi 8.1, con viento de cara por la zona del Grao que no dejó de molestar todo el viaje. Cruzando el Prat de Cabanes, varios de los caminos que tomé, terminaban en charcas o lagunas por lo que tuve que bajar hasta la playa para llegar a Torrenostra. Me falta mucho por conocer. Llegada al camping, dejo que hablen un rato entre ellas y se cuenten sus aventuras. Comienza el auténtico reto de la aventura, tras 3 horas de pedaleo, descarga las bolsas, monta la tienda, y ponte a dar a la comba, :-)) A 50 mtr. del camping, la mar y un sinfín de calas desiertas enlazadas por una PR- rodeada de espesa vegetación de aromas deliciosos. Camino del Alcossebre a Peñíscola, un auténtico goce para los sentidos de la vista, olfato y oído, No se puede explicar... hay que recorrerlo. Objetivo cumplido, tras 20 piscinas en las cuales dejar de bracear suponía un colapso multifuncional por hipotermia, el premio salta a la vis